Turismo
¿Turismo sostenible o crecimiento insostenible en Donostia?

Frente al concepto de turismo sostenible de los programa electorales, los hechos reflejan el crecimiento de visitantes (9,8% entre 2017 y 2018), la legalización masiva de viviendas turísticas (más de 1.200 en 2018), la concesión de licencias de hotel en casi todos los barrios (más de 30 licencias en 4 años) y el aumento del precio del alquiler de viviendas (más del 30% en 4 años).

Donostia Bizilagunekin
Manifestación contra la turistificación en Donostia BiziLagunEkin
Plataforma Bizilagunekin
3 jun 2019 17:12

El turismo está creando daños irreparables en muchos lugares del mundo: daños sociales, económicos y ecológicos. No es una cuestión de intransigencia de donostiarras o vascos. No es ningún odio o fobia hacia los turistas. La misma preocupación que hay en muchos otros territorios y ciudades ha aparecido en Donostia. En otros lugares, el crecimiento masivo del turismo ha causado daños irreparables. En Donostia tenemos que abordar el tema con perspectiva crítica antes de que sea tarde.

El discurso único dice en periódicos, radios y televisiones que el turismo solo trae bondades; crea riqueza; y el crecimiento del turismo es señal de éxito. Pero hace tiempo que en Donostia no tragamos ese discurso. Encontramos razones para no creerlo en nuestras propias vidas: al pagar la vivienda, al buscar trabajo, al organizar algo en la calle, al intentar decidir sobre cómo queremos que sean nuestros barrios, por ejemplo.

No tenemos nada en contra de quien visita la ciudad en sus vacaciones. Los problemas que hemos mencionado, más que de los turistas, son responsabilidad de quien ha diseñado y promueve sin medida este modelo de turismo: inversores locales e internacionales y quien les abre todas las puertas desde sus cargos institucionales.

Se quiere competir en el mercado mundial de ciudades con la marca Donostia y Basque Country. Y para eso, están transformando la ciudad sin tener en cuenta los efectos que crean en nuestros barrios y nuestras vidas. Se desprecia todo lo que no crea beneficio económico directo y se folkloriza todo lo que nos distingue para convertirlo en icono y tratar de venderlo.

Se quiere competir en el mercado mundial de ciudades y para eso, están transformando la ciudad sin tener en cuenta nuestros barrios y nuestras vidas.

Se ponen alfombras rojas a quien viene a hacer inversiones inmobiliarias o a abrir multinacionales. Se cambian leyes y se diseñan infraestructuras según sus deseos, sin poner atención a las necesidades y opiniones de la ciudadanía. Ahí tenemos el caso del metro o de la ordenanza de apartamentos turísticos. Dispuestos a todo por abrir camino al negocio del hormigón de los hoteles y de los apartamentos. La industria turística solo favorece a unos pocos y eso es lo que queremos denunciar.

El precio de la vivienda crece sin medida. Los hoteles y apartamentos están sustituyendo las viviendas residenciales, expulsando a las vecinas. Los precios de los productos y servicios van hacia arriba. Y la realidad de donostiarras expulsadas a los pueblos de alrededor está creciendo.

Se está destruyendo el comercio de cercanía; lo sustituyen souvenirs, establecimientos de cadenas multinacionales y grandes centros comerciales. Se ha generalizado la subcontratación de servicios. Al mismo tiempo, la precariedad: contratos temporales, trabajo sin contrato, sueldos de esclavitud…
También se nota en las calles. Las plazas y calles de los barrios, el espacio público, se transforma para el consumo. Los limites son cada vez más estrechos para las fiestas populares y las expresiones sociales. Pero no hay límites para los eventos superpatrocinados que convierten la ciudad en un gran centro comercial.

Se sirven de nuestra cultura y nuestras particularidades para atraer al turismo. Pero entrar en el mercado global y expulsar a la población local destruye el ambiente de los barrios. Crece la tendencia a homogeneizar la cultura y las identidades: las calles se parecen a las de otros lugares, la oferta cultural se ofrece mirando a los visitantes y las lenguas hegemónicas le quitan su espacio al euskera.

Se sirven de nuestra cultura y nuestras particularidades para atraer al turismo pero al entrar en el mercado global crece la tendencia a homogeneizar la cultura y las identidades.

Desde el Ayuntamiento, la Diputación, el Gobierno Vasco, el Gobierno de España y la Organización Mundial del Turismo (OMT), coinciden en las palabras y los hechos. Las palabras son muy bonitas, cuidadosas y sensatas. Los hechos no los son tanto. Respecto a Donostia, desde 2017 hasta hoy en día el discurso dominante ha ido cambiando y reculando a tenor de la multiplicación de los síntomas y la extensión del debate social. Empezaron negando la existencia del problema; después trataron de limitarlo al tema de los apartamentos turísticos y a la Parte Vieja de la ciudad; luego se generalizó el “ante todo la prioridad es el bienestar de los donostiarras” y han acabado integrando el concepto de turismo sostenible en los textos de programa electoral y en los planes institucionales de turismo. Palabras.

Los hechos, en cambio, son el crecimiento de visitantes (9,8% entre 2017 y 2018), la legalización masiva de viviendas turísticas (más de 1200 en 2018), la concesión de licencias de hotel en casi todos los barrios (más de 30 licencias en 4 años), el aumento del precio del alquiler de viviendas (más del 30% en 4 años). Esto no es sostenible; los daños que crean estos hechos en la vida de cada persona que habita la ciudad no son sostenibles; Más hoteles, más pisos, más multinacionales en el comercio, más eventos con fines comerciales no son sostenibles.

Si proyectamos la ciudad como un lugar para vivir y donde sus habitantes puedan desarrollar sus vidas en plenitud, seguir por la vía del crecimiento del turismo no es adecuado. Se compara nuestra situación con la de Venecia o Barcelona, tratando de relativizar o minimizar el problema; la cuestión es que no podemos esperar a alcanzar el grado de turistización y afección de estas ciudades para actuar.

El decrecimiento turístico se nos muestra como la única opción cuerda ante los riesgos que encaramos. Hay medidas urgentes a tomar, antes de que sea demasiado tare. El futuro de Donostia y sus habitantes está en juego: nuestras condiciones de vida y nuestro legado comunitario y cultural.

Es ineludible un debate transparente y abierto sobre este tema. Negar los problemas que hemos mencionado y caricaturizar o despreciar a quien se sale del discurso único no es el camino.

Debemos denunciar las afecciones que crea el turismo; hablar con vecinas y vecinos sobre este tema y responder conjuntamente a los problemas comunes. Las asociaciones de vecinas, los grupos culturales, las comisiones de fiestas, los clubes deportivos y ese tipo de redes son lo que mantienen vivos los barrios y la ciudad. Ante los que solo buscan el negocio, las donostiarras nos debemos cuidar mutuamente. Lo que afecta a nuestra ciudad, afecta a nuestras vidas. Vamos a organizarnos ante la especulación, la explotación, la estandarización y la expulsión. Los barrios que están vivos son los barrios para vivir. Y nosotras vivimos aquí y aquí queremos vivir.

Archivado en: Donostia Turismo
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Costas
Costas Las Banderas Negras 2024 ponen el foco en la urbanización del litoral y la sobreexplotación turística
Las federaciones de Ecologistas en Acción otorgan cada año 48 “premios” por mala gestión ambiental y contaminación, galardones que este año se han centrado en los excesos del modelo turístico al calor de la movilizaciones en Baleares y Canarias.
Derecho a la vivienda
Derecho a la vivienda Bustinduy avanza con su plan para prohibir la publicidad de pisos turísticos ilegales
El Ministerio de Derechos Sociales y Consumo inicia una investigación de la publicidad de pisos vacacionales ilegales en Airbnb y otras plataformas.
Catalunya
Catalunya La Ley de Amnistía echa a andar: más de 55 requerimientos presentados y hasta diez días para responderlos
Las partes —fiscalías, acusaciones y defensas— deberán dar respuesta a la norma, valorando si el caso se ubica dentro o fuera. El primer meollo se ubica en los ministerios públicos, por lo que el fiscal general del Estado ha solicitado neutralidad.
Francia
Francia El último bandazo del temerario Macron reactiva la unidad de la izquierda
Tras el batacazo en las europeas, el presidente francés abre las puertas a un Gobierno ultra convocando elecciones legislativas anticipadas. Un escenario que empuja a los partidos de izquierdas a reanudar su coalición unitaria.
Fronteras
Informe Caminando Fronteras Cinco mil vidas perdidas intentando llegar a España: récord de letalidad en las fronteras
Los acuerdos bilaterales centrados en el control migratorio sin dedicar esfuerzos a protocolos de búsqueda y salvamento explicarían el incremento de las muertes en estos primeros cinco meses de 2024, según Caminando Fronteras.
Costas
Costas Las Banderas Negras 2024 ponen el foco en la urbanización del litoral y la sobreexplotación turística
Las federaciones de Ecologistas en Acción otorgan cada año 48 “premios” por mala gestión ambiental y contaminación, galardones que este año se han centrado en los excesos del modelo turístico al calor de la movilizaciones en Baleares y Canarias.
Análisis
Análisis La ultraderecha quiere retirar la nacionalidad a españoles de origen extranjero y prohibir regularizar
Del PSOE y el PP depende votar en contra de la enmienda de VOX y acelerar el trámite parlamentario para que se debata y apruebe la ILP Regularización Ya dentro del plazo parlamentario.
Opinión
Tribuna El odio pasará y caerán los dictadores
Observando desde Chaplin y su Gran dictador el avance en Europa de los viejos monstruos que nunca se fueron.
Genocidio
Ejército israelí “Tengo miedo de lo que le puedan mandar hacer en Gaza”
La división israelí entre quienes quieren un alto el fuego y quienes optan por la continuación de la guerra “hasta la victoria final” está también presente entre las madres de los soldados israelíes.
Partidos políticos
Partidos políticos Díaz se postula para seguir haciendo “política de la buena” y no se borra de candidata a las generales
La vicepresidenta tercera del Gobierno asegura que “no se va” del espacio político de Sumar. Izquierda Unida llama a un frente amplio y su coordinador cree que hay que superar el personalismo de Díaz para abrir una nueva etapa.

Últimas

Comunidad El Salto
Comunidad El Salto Las cuentas de El Salto 2023-2024: cada vez más, un gran medio financiado por la gente
El Salto supera el millón de euros anuales de ingresos y aumenta su plantilla hasta llegar a las 28 personas empleadas. Todo eso con criterios éticos de financiación, funcionamiento horizontal y una cooperativa de propiedad colectiva.
Opinión
Opinión Una hipocresía sin límites
¿Cómo se logra instalar el discurso del genocida? ¿Cómo se puede creer en la falacia de que el colonizador se defiende del colonizado?
El Salto Twitch
El Salto TV La Catana 2x07: Vacaciones y turistificación con Califato 3/4
Volvemos a mezclar música con comunicación, esta vez con olor a verano. El día del lanzamiento de “No Me Daba Cuenta”, Califato 3/4 atiende a La Catana para hablar sobre el impacto del turismo en su tierra, Andalucía.
Más noticias
Opinión
Tribuna El odio pasará y caerán los dictadores
Observando desde Chaplin y su Gran dictador el avance en Europa de los viejos monstruos que nunca se fueron.
Análisis
Análisis Miremos más allá de las elecciones europeas y retomemos el ¡No a la guerra!
En las elecciones europeas nos jugábamos mucho porque marcarían nuestro devenir y aporte como europeos a cómo hacer frente y movernos frente al agotamiento del modelo surgido tras el colapso de la Unión Soviética.
Multinacionales
Derechos humanos El gigante de la fruta Chiquita Brands es condenado por haber contratado a paramilitares colombianos
La multinacional, heredera de la siniestra United Fruit Company, es condenada a pagar 38 millones de dólares por haber financiado al comando paramilitar Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
Derechos Humanos
Represión Los patrones comunes de criminalización de los movimientos sociales en América Latina y València
Un informe elaborado por alumnado de la Universitat de València y Entrepobles compara la represión sufrida por activistas ecologistas, feministas y defensoras de derechos humanos.

Recomendadas

Cómic
Ángel de la Calle “La obra más importante de arte contemporáneo del siglo XX son las Madres de Plaza de Mayo”
La novela gráfica ‘Pinturas de guerra’, firmada por Ángel de la Calle, recrea las experiencias artísticas y armadas que, desde el exilio, sobrevivieron al horror de las dictaduras militares latinoamericanas. Esta primavera ha vuelto a las librerías.
Palestina
Palestina Palestina más allá del reconocimiento
El anuncio sobre el reconocimiento del Estado de Palestina por parte de España constituye un paso considerable, pero no está acompañado de la adopción de otras medidas necesarias para su consolidación efectiva.
Genocidio
Reino Unido Un barrio acampado contra el genocidio
Las vecinas del municipio londinense de Hackney plantaron las primeras tiendas hace algo más de un mes. Perseverando fuera de los campus, echan su pulso particular para que las autoridades municipales rompan con Israel.
Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN)
30 años del levantamiento del EZLN Los retos del zapatismo hoy: cárteles, gobierno y militarización
En el tercer artículo de la serie de “30 años del levantamiento del EZLN”, el autor hace un recuento de la extraordinaria militarización de Chiapas y de cómo la narcoviolencia se hizo presente en este Estado del sureste mexicano