Andalucismo
El privilegio de poder pensarse (o la autorreferencialidad como privilegio)

Compartimos este fragmento de Ana Burgos García, antropóloga, feminista y perdiodista andaluza radicada en Catalunya desde hace una década. Este texto fue escrito en 2014 en su blog personal heroína de lo periférico y recuperado en 2016 por Mar Gallego en su texto ya canónico texto Perder el norte. Feminismo y ¿andaluzofobia?, de 2016 donde enunció la propuesta de feminsimo andaluz, que luego desarrollaría en sus proyectos posteriores.
Dos campesinas, fragmento
Fragmento de la obra, Dos campesinas del pinto andaluza Rafael Zavaleta (1907-1960) Pensar Jondo
Artículo de Ana Burgos @perifericah antropóloga, feminista y periodista andaluza en Barcelona
3 jun 2023 19:44

Compartimos este fragmento de Ana Burgos García, antropóloga, feminista y perdiodista andaluza radicada en Catalunya desde hace una década. Este texto fue escrito en 2014 en su blog personal heroína de lo periférico y recuperado en 2016 por Mar Gallego en su texto ya canónico texto Perder el norte. Feminismo y ¿andaluzofobia?, de 2016 donde enunció la propuesta de feminsimo andaluz, que luego desarrollaría en sus proyectos posteriores. En ese texto Mar Gallego señalará que:  La activista feminista y antropóloga onubense Ana Burgos lleva tiempo queriendo poner el debate sobre la mesa. Considera que la identidad andaluza ha sufrido un proceso de desempoderamiento histórico y de desposesión de autoestima que en su caso ha llevado, incluso, a disimular su propio acento. El término que usa para expresar su sentir y su experiencia es “andaluzofobia”. Un término que no pretende únicamente poner una discriminación sobre la mesa sino que también apelar al sentimiento que, mantiene, existe en el interior de las personas andaluzas: “Hay casi una andaluzofobia interiorizada muy alejada de ese ‘ole mi tierra’”, asegura. Pero la cuestión de los lenguajes y los acentos, para Burgos, es sólo una muestra de una discriminación histórica que está en relación directa con las dinámicas de clase Norte-Sur. Según platea la activista, éstas hacen que no se reconozcan los discursos discriminatorios hacia lo andaluz desde fuera, ni siquiera dentro del propio activismo. Su posición, de hecho, surgió tras situaciones que experimentó dentro del propio activismo. Todas ellas le llevaron a plantear el tema desde su blog personal en el que escribía que por ser andaluza se le instaba a moderarse, a adaptarse a unas formas norteñas de comunicación, expresión y ocupación del espacio y del tiempo: “Se me insta a la corrección y se me aplaude cuando me alejo del charneguismo macarra con el que se me asocia a primera vista”.

Nos proponemos indagar en el concepto de andaluzofobia propuesto por Ana Burgos, y recogido y desarrolado por Mar Gallego. Paradógicamente una de las autoras Ana Burgos, produjo estas reflexiones como andaluza en Barcelona y Mar Gallego, muchas veces ha señalado que su condición de andaluza migrada a Madrid, fue parte del proceso de despertar de esta conciencia crítica que le permitió ser consciente de lo que posteriormente ambas han llamado la andaluzofobia. Reproducimos el texto de Ana Burgos con la intención de seguir pensando la formación de la conciencia andaluza y los aprendizajes que recoge del feminismo, el activismo y las memorias migrantes y territoriales. 

El privilegio de poder pensarse (o la autorreferencialidad como privilegio)

Echo de menos el sur.

Mucho. Echo de menos el pensarme, el pensarnos como pueblo, el compartir alrededor de la mesacamilla reflexiones sobre quiénes somos, cómo nos construimos, cómo nos construyen, cómo nos relacionamos con lxs otrxs, las muchas opresiones y pocos privilegios que nos atraviesan como pueblo. 

Viviendo en Catalunya me pasan cosas, entre las que ahora destaco dos: Me pasa que soy de fuera. A veces soy “española”. A veces lo disimulo por esta cosa mía de imitar acentos. Pero la mayoría de las veces soy del sur, más concretamente, andaluza. Y eso (sí, podemos discutirlo mucho pero yo lo veo/siento bastante claro) me coloca en una posición de subordinación. Soy cateta, arrabalera, inculta y hablo alto. Y continuamente, a través de las estrategias más explícitas hasta las más sutiles, encarnadas y consustanciales a una estructura desigual de reparto de poderes -de condiciones de posibilidad-, se me insta a moderarme, a adaptarme a unas formas (por otro lado, ficticas y falaces) norteñas, por no decir catalanas, de interacción, comunicación, expresión y ocupación del espacio y del tiempo. Se me insta a la corrección y se me aplaude cuando me alejo del charnegismo macarra con el que se me asocia a primera vista. 

También me pasa que admiro. Admiro al poble català por su capacidad de pensarse, de autocuestionarse (un artículo de hoy de Mireia sobre el racismo y clasismo inherente a la identidad monolítica y hegemónica que nos quieren vender los de arriba para configurar el “procés” es una buena prueba de ello), de quererse y de lucharse. El proceso en el que ahora se encuentra inmerso este pueblo, y del que me siento contentísima de seguir de cerca y hasta de formar parte, es súper potente. Un pueblo que se autodetermina, que decide a través de la participación (más o menos real, conseguida o efectiva) quién quiere ser y dónde / cómo quiere estar. Independència per canviar-ho tot y otros lemas del montón. Pero claro, las capacidades no son gratuitas, innatas ni crecen como champiñones en una tierra estéril; esa tierra se trabaja y se riega y para ello hay que tener unas condiciones, condiciones marcadas por la posición de poder /no poder que ocupes en el mundo. Entonces me pasa que admiro, pero también “envidio” y siento ese corajito (aka “odio de clase”) de que ellxs tengan tanto espacio para la autorreflexividad (autorreferencialidad?) y nosotras tan poco... 

Lejos de victimismos y cerca de la voluntad de explicitar las relaciones de poder que nos atraviesan, como andaluzas en Andalucía y como andaluzas en Catalunya, hoy lanzo mis ganas de tratar todo esto en colectivo, de hacer más llevadero el dolor de la opresión, de que luchemos por generar las condiciones de posibilidad para nombrarnos, pensarnos, quererenos y decidirnos. Nuestro sur como lugar de enunciación, nuestro sur como posición política, nuestro sur con el que nos inventamos la identidad y las formas que nos den la gana, sin pedir permiso, aquí y en Pekín. 

¡Y QUE VIVA EL SUR, CARAJO!


Sobre este blog
Espacio de enunciación colectiva, encrucijada de ideas y reflexiones en torno a la descolonización de Andalucía, de sus prácticas y de su teoría social crítica. Cooridinado por Javier García Fernández @JavierGarcaFde1
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Andalucismo
Tercera ola andalucista Andalucismo y diáspora
Tenemos dos millones de razones para empezar a hilar esa memoria colectiva y para reconstruir con nuevos cimientos nuestra casa común del andalucismo.
Andalucismo
Tercera ola andalucista La continuidad de la tercera ola andalucista
El andalucismo se encuentra en un punto de inflexión en el cual debe decidir qué objetivos perseguirá a futuro como movimiento.
Adelante Andalucía
Tercera ola andaluza El nacionalismo andaluz y la voz propia andaluza
El nacionalismo andaluz desde Blas Infante ha reclamado para sí la voz propia en la defensa de Andalucía.
Sobre este blog
Espacio de enunciación colectiva, encrucijada de ideas y reflexiones en torno a la descolonización de Andalucía, de sus prácticas y de su teoría social crítica. Cooridinado por Javier García Fernández @JavierGarcaFde1
Ver todas las entradas
Ocupación israelí
Genocidio en Gaza La comunidad palestina demandará al Gobierno español por incumplir la Ley de Comercio de Armas
El Gobierno sigue sin romper las relaciones militares con Israel y sigue permitiendo el tránsito de armas por territorio español, denuncia la comunidad palestina de Catalunya, que llevará al Ejecutivo central a los tribunales.
Ocupación israelí
GENOCIDIO EN GAZA La UPV/EHU recibirá 4,2 millones por colaborar en nueve proyectos europeos con Israel
Hasta tres universidades, así como cuatro entidades gubernamentales de Israel, acompañan a la Universidad del País Vasco-Euskal Herriko Unibertsitatea en iniciativas de la Unión Europea donde participan además empresas que contribuyen al genocidio.
Palestina
Palestina Mustafa Barghouti: “Tiene que haber un embargo militar inmediato contra Israel”
El líder de Iniciativa Nacional Palestina saluda el reconocimiento del Estado por parte de tres países europeos pero exige que los gobiernos tomen nota de las demandas de los pueblos que piden medidas de boicot para aislar al régimen de Netanyahu.
Urbanismo
medio ambiente El mar no espera: retrato de la regresión del litoral alicantino
La línea de costa mengua año tras año a causa de temporales marítimos y los estragos que generan diques, puertos, y espigones en las corrientes, que modifican la superficie arenosa.
Estados Unidos
Estados Unidos Trump es declarado culpable de 34 delitos, pero la condena no le impedirá presentarse en noviembre
El expresidente republicano hizo pagos a dos mujeres para encubrir sus relaciones sexuales y falsificó esos pagos en los documentos de su campaña presidencial de 2016. La sentencia será leída en julio.
Energías renovables
Energía y territorio Avalancha de macroparques solares en suelo rústico en Mallorca
La plataforma Renovables sí, però així no reclama una moratoria para frenar los más de 70 proyectos en tramitación que amenazan el campo isleño.
Especulación inmobiliaria
Gentrificación ¿Por qué se levanta Lavapiés?: “Esta manifestación es solo el principio”
El tejido social del barrio convoca la gran manifestación del 1 de junio para visibilizar la recuperación de la movilización vecinal y denunciar la turistificación, la destrucción de los servicios públicos o el racismo institucional

Últimas

Educación infantil
Educación en Madrid Cierra una escuela infantil pública de Arganda por falta de personal
El centro, gestionado por la empresa Atreyu Blota Carto, cuenta con más del 45% del personal de baja y sin reposición de puestos. 170 familias llevan sin clase desde el jueves.
Ocupación israelí
Genocidio en Gaza El sonido de las bombas en Gaza irrumpe en las calles de Logroño
Una quincena de activistas acampados en la Universidad de La Rioja ha trasladado el sonido de las bombas que día a día resuenan en Gaza a las calles de Logroño
Violencia machista
Precariedad laboral Huelga de 24 horas en el servicio de atención a las víctimas de violencia machista en Madrid
Las trabajadoras denuncian que el problema, que ya provocó paros parciales y concentraciones, se enquista. Las trabajadoras de la red denuncian falta de personal, de medios y de alojamientos para atender a las mujeres y sus hijos e hijas.
Sanidad
Sanidad pública de gestión privada El Hospital del Vinalopó seguirá privatizado pese a las 15.000 firmas en contra
Este viernes 31 de mayo finaliza el plazo para que se inicien los trámites de reversión al sistema público que el gobierno de Mazón no activará pese a la ausencia de informes que avalen la prórroga de la concesión.
Palestina
Acampadas Universitarias Palestina “Hay que seguir dando pasos para hacerle sentir a Israel como nos sentimos nosotros: solos y abandonados”
Muawia y Juan, palestino e israelí, han encontrado en la acampada por Palestina de la Universidad de Jaén, un espacio de encuentro que difícilmente podrían tener en su tierra. Un lugar seguro para resistir conjuntamente los envites de la ocupación y
Ocupación israelí
Genocidio en Gaza Una acción de desobediencia civil en Sol pide la ruptura del Gobierno y las universidades con Israel
Estudiantes de la Acampada de Madrid por Palestina despliegan una pancarta gigante para exigir el fin de la colaboración con el gobierno y los centros universitarios israelíes.
Tratado de la Carta de la Energía
TCE Victoria de los activistas climáticos: la UE Sale del Tratado de la Carta de la Energía
VV.AA.
La salida del TCE se erige como un faro de esperanza y un testimonio del poder de nuestro activismo colectivo para moldear un mañana mejor.

Recomendadas

Literatura
Literatura Las escritoras de ‘clima ficción’ que llegan de América Latina
Autoras como Andrea Chapela, Clauda Aboaf, Adriana Bruno, Laura Ortiz o Silvia Moreno-García amplían los límites de la ciencia ficción o la fantasía en clave ecologista, decolonial y de memoria.
Política
Política El congreso aprueba la ley de Amnistía
Los 177 votos afirmativos dan luz verde a una de las leyes claves de la legislatura con la misma mayoría del bloque de la investidura.
Derecho a la vivienda
Abuso Policial Los 18 de la Macarena: cómo la violencia policial acabó con un proyecto para personas sin hogar
18 personas fueron detenidas y enviadas a prisión provisional en Sevilla en 2018 por la ocupación de viviendas para personas en situación de calle tras un desalojo mediado por la violencia policial. En julio se celebra el juicio contra los imputados.
Ocupación israelí
Ilán Pappé “Netanyahu y la extrema derecha israelí buscan una limpieza étnica en Gaza”
Este historiador israelí pone en duda que las presiones internacionales consigan frenar el genocidio aunque reconoce en conversación con El Salto que se está produciendo un cambio en la opinión pública mundial.